viernes, 13 de julio de 2012

JACK VUELVE VII Y UNA MUY BUEEENA NOTICIA!!!!

    HOLA A TODOS!!!
   LA SEMANA PASADA LO DEJAMOS EN UN "CASI" PERO AL FINAL EL MOMENTO LLEGÓ.
EL PASADO 10 DE JUNIO, ACCIDENTALMENTE, DESCUBRÍ UNA CONVOCATORIA DE UNA EDITORIAL QUE SE LLAMA TYRANNOSAURUS BOOKS Y QUE SE DEDICA AL PULP Y AL TERROR. EN ESTA OCASIÓN EL TEMA DE LA CONVOCATORIA ERA "FANTASÍA ÉPICA", ES DECIR MUNDOS IMAGINARIOS COMO"EL SEÑOR DE LOS ANILLOS", ESPADA Y BRUJERÍA, ETC.
   LA FECHA LÍMITE ERA EL 15 DE JUNIO, SÓLO CINCO DÍAS DESPUÉS. A PESAR DE NO HABER ESCRITO NUNCA SOBRE ESE TEMA ME PUSE MANOS A LA OBRA, Y AL FINAL ESCRIBÍ UNA HISTORIA DE UNAS 17 PÁGINAS QUE NO TERMINABA DE CONVENCERME MUCHO Y QUE NO PUDE RETOCAR POR FALTA DE TIEMPO.
   MI SORPRESA VINO AYER 12 DE JULIO, CUANDO PUBLICARON LA LISTA DE RELATOS SELECCIONADOS Y... ¡EL MÍO ESTABA ALLÍ! JUNTO CON LOS NOMBRES DE UN MONTÓN DE ESCRITORES ARCHICONOCIDOS EN EL MUNDO DE LA FANTASÍA Y EL TERROR, POR SI ERA POCO.
   EL LIBRO SALDRÁ DESPUÉS DEL VERANO, YA OS IRÉ CONTANDO. DE MOMENTO PODÉIS VER EL FALLO ARRIBA, EN LA PESTAÑA "PUBLICACIONES".
   Y AHORA SÍ, VAMOS A LO NUESTRO. A VER QUE SE CUENTAN FAITH Y LOS DEMÁS.
   UN ABRAZO Y HASTA PRONTO.

- El remedio que más le conviene a su hija, Sir Richard, es una temporada alejada de la ciudad. Una nueva recaída podría ser fatal para ella –dijo el doctor, dedicando una condescendiente mirada a Faith, quien a pesar de yacer en cama, correspondió la amabilidad del buen doctor con un gesto muy significativo.
- Me parece una idea excelente –respondió sir Richard, dubitativo, sabiendo lo que llegaría en el momento en que se quedara a solas con su hija-. Aprovechando la llegada del estío, quizás podamos trasladarnos a nuestra residencia en la campiña.
- Por supuesto, padre –Faith no pudo mantener la boca cerrada por más tiempo-. Puedes marcharte cuando gustes. Yo he de permanecer aquí, las obligaciones de la casa me reclaman. Además, no sé muy bien qué podría hacer yo sola en aquella enorme casa. Lo ocurrido ayer fue simplemente… no sé cómo explicarlo, pero ya estoy casi repuesta. No hay nada de qué preocuparse.
- Pues yo creo que tienen razón, querida –Constance permanecía sentada, relegada a un segundo plano durante la visita del doctor. Había permanecido esa noche junto al lecho de su amiga, escuchando sus delirios febriles que ahora se habían evaporado como la bruma de la mañana al elevarse el sol-. Tanto sobresalto está haciendo mella en tu salud. Si quieres, puedo acompañarte unos días en tu viaje. Así no estarás sola.
- Ya podéis empeñaros tanto como os plazca, pero no me moveré de aquí.
Sir Richard movió la cabeza con resignación. La testarudez de su hija era proverbial. “Igual que su madre”, pensó con añoranza. Mejor sería volver a la carga más tarde. Con un gesto, acompañó al doctor hasta la puerta, dejando a las muchachas a solas.
- Debería intentar convencerla a toda costa –insistió el doctor-. Todo lo que había mejorado en esta semana lo ha perdido de golpe. ¿No ha visto usted sus ojeras? Yo diría que se van apoderando de su rostro en lugar de desparecer. La fuerte impresión que sufrió ayer ha resultado  fulminante. Aunque no me extraña, teniendo en cuenta las circunstancias. Hoy en día ya no es seguro para una dama caminar sola por la calle. Imagínese lo que podría haber sucedido.
- Ni me lo mencione, Charles. Se me pone la carne de gallina de pensar que la que podía haber estado allí… de esa manera, ya me entiende, podía haber sido ella. Lo que me intriga es qué diantre estaría haciendo mi hija en ese sucio callejón. Por más vueltas que le doy, no acierto a comprender el motivo. Y esa otra muchacha…
- Déjelo, Sir Richard, mejor no lo mencionemos. A decir de las personas que estuvieron allí, pues conozco a un par de ellas, la escena era insoportable. Es mejor pensar que Faith llegó cuando todo había acabado. De haber llegado unos minutos antes... No, no lo piense usted.
- Lo cierto es que no puedo quitármelo de la cabeza, mi querido amigo –dijo Sir Richard mientras tendía el abrigo y el sombrero al doctor frente a la puerta de la calle-. En fin, le agradezco su preocupación y sus cuidados. Sé que está haciendo lo imposible para venir a visitar a Faith, teniendo en cuenta que se usted un médico muy solicitado.
 - No es ninguna molestia. Vengo encantado. Ya sabe que puede contar conmigo a cualquier hora del día o de la noche.
El doctor abrió la puerta y se dispuso a salir, pero el paso que había iniciado no llegó a posarse en el suelo. Ambos se quedaron atónitos.
- Buenas tardes –dijo el sargento de policía tocándose el ala del gorro a modo de saludo-. Necesito hablar con su hija con la máxima urgencia, Sir Richard. Es de vital importancia. Se trata de resolver un asesinato.

2 comentarios:

  1. ¡Enhorabuena Vidal!
    Después de tu perseverancia, te lo mereces. Ya nos irás contando qué tal :)
    Felices vacaciones.
    María Ruiz, la de tu calle!

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  2. Muchas gracias, María!!
    Ha costado, la verdad, pero me muero de ganas de tener el libro en las manos.
    Que pases un buen verano tú también, te lo has ganado igualmente
    Un abrazo

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